Un pequeño bosque como regalo de boda
Ariadna y Oriol se casaron el pasado mes de septiembre en un pequeño pueblo de Lleida, Cataluña. Para su boda, querían regalar a todos los asistentes algo diferente, algo significativo que la gente recordara. Y ahí surgió la idea: un pequeño bosque.
Los novios decidieron adoptar un árbol por cada asistente de la boda, y esos 92 árboles se convertirían en el regalo: "El pequeño bosque de Ariadna y Oriol".
No queríamos regalar el típico obsequio que la mayoría de la gente acaba tirando a la basura o olvidando en un cajón. Queríamos hacer un regalo que durara, incluso más que nosotros, y que además ayudara al planeta; y fue entonces cuando pensamos en un árbol.
El día de la boda, una pequeña tarjeta esperaba en el plato de cada asistente con un código QR con el que podían obtener su propio árbol y verlo en la plataforma Life Terra. Además, también incluía un enlace con el panel general del bosque, donde la gente podía ver dónde están plantados todos los árboles.
Como Ariadna y Oriol viven en Lleida, pero la mayoría de su familia y amigos viven en Barcelona y Puigcerdà, decidimos encontrar una ubicación intermedia, en el centro de Cataluña, Bellprat, para que fuera más fácil para todos visitar su nuevo pequeño bosque: