Créditos de biodiversidad

Una herramienta para la conservación y la sostenibilidad

La biodiversidad es uno de los principales focos de atención de los proyectos de reforestación y restauración de tierras degradadas de Life Terra.

Su integración en los proyectos de compensación de carbono aumenta los beneficios ambientales, sociales y económicos, contribuyendo a soluciones más holísticas basadas en la naturaleza para hacer frente al cambio climático y la degradación del suelo.

En Life Terra, trabajamos con créditos de biodiversidad obtenidos de nuestros proyectos profesionales de plantación de árboles en más de 25 países de Europa.

¿Qué son los créditos de biodiversidad?

Los créditos de biodiversidad son instrumentos innovadores que convierten las mejoras ecológicas en activos medibles y negociables. Estos créditos reconocen y recompensan las acciones encaminadas a conservar, restaurar y gestionar los ecosistemas de forma sostenible. Esencialmente, cada crédito representa una unidad específica de mejora -como la restauración de hábitats, el aumento de la diversidad de especies o la mejora de la funcionalidad de los ecosistemas- que proporciona una medida tangible del valor regenerado de la naturaleza.

Este planteamiento no sólo estimula la gestión medioambiental, sino que también transforma el capital natural en un activo económico, allanando el camino para iniciativas de conservación impulsadas por el mercado.

¿Cómo se obtienen los créditos de biodiversidad?

Trabajamos en colaboración con NAT5 para verificar y emitir créditos de biodiversidad. NAT5 lidera el desarrollo de metodologías para los créditos de biodiversidad (a través de documentos como el marco aOCP) e integra tecnologías de vanguardia para la transparencia. Su trabajo no sólo respalda la emisión precisa de créditos, sino que también sirve de base a las políticas e impulsa el cambio sistémico en las prácticas de conservación.

El procedimiento de expedición se basa en metodologías validadas científicamente y sigue un planteamiento riguroso, paso a paso:

  1. Evaluación de referencia: Antes de iniciar cualquier acción de conservación o restauración, se lleva a cabo una evaluación detallada para documentar el estado actual de la biodiversidad. Este estudio de referencia utiliza encuestas in situ, imágenes por satélite y modelos ecológicos para establecer los puntos de referencia con los que se medirán las mejoras futuras.

2. Ejecución y seguimiento del proyecto: Una vez definida la línea de base, se aplican medidas activas de conservación. El seguimiento continuo se lleva a cabo utilizando métodos estandarizados detallados en documentos clave. Estos protocolos garantizan que cualquier cambio ecológico se registre de forma coherente y reproducible.

3. Cuantificación y cálculo de créditos: Tras la recogida de datos, las mejoras medidas de la biodiversidad se cuantifican conforme a criterios y métricas específicos. Las normas asignan un valor claro a cada unidad de mejora ecológica, que luego se representa como créditos de biodiversidad.

4. Verificación y certificación independientes: Para garantizar la exactitud y la transparencia, organismos de certificación independientes verifican que los proyectos hayan cumplido las metodologías establecidas y que las mejoras sean reales y cuantificables. Esta verificación externa es esencial para alinear los créditos con marcos internacionales reconocidos.

5. Registro y expedición definitiva: Una vez verificados, los créditos de biodiversidad se emiten y registran en un registro transparente, a menudo respaldado por tecnologías como blockchain. Esto garantiza una trazabilidad total, haciendo que el historial de cada crédito sea inmutable a lo largo de su ciclo de vida.

¿Por qué invertir en créditos de biodiversidad?

Los créditos de biodiversidad pueden aportar múltiples beneficios:

  • Incentivos económicos y financieros: Al convertir las mejoras ecológicas en créditos comercializables, los terratenientes, inversores y promotores de proyectos se ven recompensados económicamente, lo que fomenta nuevas inversiones en restauración de la biodiversidad y uso sostenible de la tierra.

  • Alineación con los Objetivos Mundiales de Sostenibilidad: Los créditos a la biodiversidad contribuyen directamente a la consecución de objetivos mundiales clave, como la lucha contra el cambio climático y la preservación de los ecosistemas naturales, y apoyan una amplia gama de iniciativas y políticas de sostenibilidad.

  • Mayor valor de los ecosistemas: proporcionan una perspectiva más amplia a los esfuerzos de restauración ecológica, haciendo que el valor final de la restauración aumente y permita que sea más realista y esté a la altura del verdadero valor de una acción sostenible y de unos ecosistemas sanos. Además, se recompensan las buenas prácticas medioambientales.

  • Catalizador de la conservación impulsada por el mercado: Al convertir los beneficios ecológicos en activos económicos, los créditos a la biodiversidad promueven un enfoque basado en el mercado que hace que la conservación sea financieramente viable y ampliable. Este enfoque transforma la gestión medioambiental en una estrategia de inversión generalizada que apoya la resiliencia ecológica a largo plazo.